El déficit de vivienda en Argentina es muy alto y no se avisora una solución

El déficit de vivienda en Argentina es de 2.600.000 hogares, según el Censo de 2001. Ante este panorama, y luego de un par de años de remar para salir de la crisis, el Gobierno nacional anunció créditos hipotecarios con mayores facilidades para los sectores medios de la población. Sin embargo, la iniciativa no parece estar funcionando.

Una gran expectativa produjo el anuncio de los créditos hipotecarios para inquilinos, que el jueves último se convirtió en ley; pero a pesar de ser una medida que intenta expandir las oportunidades de acceso a la vivienda, no estarían al alcance de todos. Juan Carlos Franceschini, de la consultora CDI, advirtió que el beneficio alcanzará «sólo a los que necesitaban financiación. Un departamento usado, en Caballito, cuesta en promedio 62.800 dólares (cercade 190.000 pesos), y con un crédito a 30 años, con una tasa del 8%, la cuota estaría cerca de los 1400 pesos. Es decir que el inquilino debería tener ingresos superiores a los 4000 pesos».

Por su parte, Germán Gómez Picasso, de Reporte Inmobiliario, considera que «la tasa de interés debería ser de 5% para que fuera accesible, pero eso es imposible». Pero, ¿cuál sería la solución para los más de 2.600.000 hogares deficitarios, según revela la estadística del Censo de 2001 (que no incluye el crecimiento vegetativo de los últimos años)?. «El Estado no debe subsidiar la tasa», repiten a coro los especialistas. Mientras que Jorge Brito, presidente de la Asociación de Bancos de Argentina (ADEBA) y del Banco Macro, durante la 12ª Conferencia Industrial Argentina que la UIA organizó en Córdoba, propuso resignar ubicación: «Los que alquilan en Belgrano deberán comprar en Lugano».

Algunos sostienen que incorporar más usuarios de ingresos medios potenciará el desarrollo en zonas periféricas y podría descomprimir los precios ante la aparición de más oferta. Sin embargo, el economista Cristian Módolo piensa lo contrario: «La mayor demanda presionaría los precios hacia arriba». Mientras exista la brecha entre precios dolarizados y bajos salarios en pesos, y con un sistema bancario que aún no recuperó su confiabilidad, ser propietario de una vivienda seguirá siendo un sueño.

Fuente: lanacion online